Patrimonio
Castillo de Serra
Construcción del siglo VIII-IX, se encuentra situada en la montaña del mismo nombre a 536 metros de altitud, cerca de la población. El castillo pertenecía al sistema defensivo del norte de València y su localización es la típica de los castillos de época árabe: situado sobre una cima que domina tanto el valle del Turia como el acceso a la Serra Calderona.
El castillo es una fortaleza que tiene una planta de 600 metros cuadrados. Se conserva una torre de planta cuadrada al extremo nordeste y dos lienzos de muralla con almenas que confluyen con aquella y un aljibe. Quedan restos de una segunda torre, situada al noroeste, más pequeña que la anterior, así como fragmentos de los muros perimetrales y vestigios de la salida de los mismos muros que permiten recomponer la irregular planta del Castillo.
Su altitud permite observar parte del litoral valenciano, las comarcas de l’Horta y la Serra Calderona. Está declarado Bien de Interés Cultural.
Torre del Señor
Construcción del siglo IX, de origen islámico. Se encuentra dentro del municipio de Serra, en la calle Cantó de la Torre. Formó parte del sistema defensivo del castillo; pero con el paso del tiempo quedó dentro de la casa palacio del señor de la Villa. Su perfil es ligeramente trapezoidal y estaba almenada. A pesar de los más de mil años que han transcurrido desde su construcción, los muros de la torre están en buen estado. La torre ha resistido el paso de los siglos y la construcción de viviendas a su lado. Está declarada Bien de Interés Cultural.
Torre de la Ermita
Torre centinela de origen islámico del siglo IX. Formaba parte del sistema de vigilancia del castillo de Serra. Conserva la mayor parte de su cuerpo principal. Es de planta cuadrada, construida con muros de tapial de piedra con mortero de cal sobre una base de grandes piedras. Presenta una abertura a unos dos metros de la base. Se encuentra al lado de la ermita de Sant Josep i la Creu, al final del calvario. Ofrece buenas vistas sobre la población. Está declarada Bien de Interés Cultural.
Torre de Ria
Torre de origen islámico del s. VIII-IX. Elemento defensivo y de vigilancia del desaparecido pueblo de Ria, ubicado en las inmediaciones de la torre. La torre de Ria es de planta casi cuadrada, construida con muros de piedra y tapial, cubierta de mortero de cal. Originariamente su color era blanco y todavía se conservan restos. La construcción presenta una pequeña obertura, por donde se accede al pequeño recinto. Está ubicada junto al camino de la fuente de l’Ombria. Está declarada Bien de Interés Cultural.
Torre de Satarenya
Construcción de origen islámico, siglos VIII-IX. Formó parte del sistema de alerta y vigía del castillo e informaba de los movimientos que se producían en la zona de Nàquera. Es de planta cuadrada, construida sobre fábrica de tapial de mampostería, los muros estaban revestidos con una capa de mortero de cal. La entrada estaba en la primera planta. Actualmente está en ruinas y se conserva únicamente la primera planta. Se accede por el camino de les Vinyetes, desde la pista forestal del Castell. Està declarada Bien de Interés Cultural.
Calvario y Ermita
El calvario de Serra, está situado en la parte alta del núcleo urbano. Su privilegiada situación lo hacen único e incomparable. Está formado por avenidas de cipreses y elegantes capillas blancas que imitan el estilo gótico. Las capillas que representan el Via Crucis están alineadas entre los troncos de los cipreses, y al fondo, muros de piedra seca, ribazos magistralmente construidos. Seis dulces rampas seguidas completan el ascenso hasta la cima de la loma donde se encuentra la ermita de Sant Josep i la Creu, i la torre vigía de la Ermita. El calvario se acabó de construir en 1893. Es un Bien de Relevancia Local. Coronando el calvario, se encuentra la ermita de Sant Josep i la Creu, construcción sencilla que data de 1894. Es un ermita pequeña con tejado a dos aguas, fachada blanca y un faldón en el ábside. Las dos construcciones son Bien de Relevancia Local.
Iglesia de la Mare de Déu dels Àngels
La iglesia parroquial es obra del arquitecto valenciano Francisco Pechuán. Fue terminada de construir en 1.800 y es fruto de sucesivas ampliaciones. De estilo neoclásico, consta de una sola nave con pilastras, arcos de medio punto y bóveda de medio cañón en la nave central, brazos del crucero y altar mayor. La iglesia está presidida por la imagen de la Mare de Déu dels Àngels a la que los serranos le tienen mucha devoción. La iglesia está considerada Bien de Relevancia Local.
Cartuja de Portaceli
La Cartuja de Portaceli fue el primer monasterio de la orden religiosa de la Cartuja fundado en tierras valencianas en 1.272. Portaceli se levantó sobre los restos de un pequeño poblado andalusí en el valle de Lullén adquirido por Andreu Albalat, confesor del rey Jaime I y fundador del monasterio.
Este paraje de Serra era el lugar idóneo para el retiro espiritual y el silencio propio de la vida de la orden. Construido originariamente en estilo gótico, a lo largo de su historia se fue reformando en función de los estilos arquitectónicos de cada época: renacimiento, manierismo, barroco y neoclásico. Adosado a la Cartuja perdura un acueducto gótico del siglo XV.
Portaceli fue un centro de influencia política y religiosa de primer orden. Dentro de sus muros se tradujo la primera biblia al valenciano por Bonifacio Ferrer, hermano de San Vicente. Parte del patrimonio de la cartuja, obra de Ribalta, Camarón y Planes, está depositado mayoritariamente en el Museo San Pío V de València.
Con la desamortización de Mendizábal en 1835, el priorato se dividió en tres masías: la Mayoralía, la Pobleta y la Torre y sus bienes pasaron a manos particulares. Los monjes cartujos de Portaceli volvieron a ocupar el monasterio en los años 40 del siglo pasado. En 2006, el monasterio fue declarado Bien de Interés Cultural con la categoría de monumento. En la actualidad no se puede visitar.
Lavadero
El lavadero de los Castellets o del bario latino, está situado a la entrada de la población por la carretera CV-310 que viene desde València. Es una construcción de 1938 y junto al lavadero de la plaza de la Font, actualmente desaparecido, era uno de los puntos de encuentro y foco de sociabilización femenina. Allí se acudía a hacer la colada, pero también era un lugar para entablar y cultivar las relaciones sociales en un mundo pensado para los hombres.
El lavadero consiste en una balsa rectangular y alargada que recogía el agua. La entrada de un hilo continuo de agua limpia hacía que esta se regenerara constantemente de la suciedad y el jabón de la superficie.
La construcción está formada por cuatro pilares de piedra que sustentan una estructura de madera, sobre la que se asienta una cubierta de tejado a dos aguas.
Ventisquer de Rebalsadors
El Ventisquer del Rebalsadors se localiza a 785 m de altitud, en la cabecera del barranco de la Nevera que drena la vertiente Norte de la cima Oeste de la montaña de Rebalsadors. Es de planta circular i tiene una capacidad aproximada de 1.100 m3. Es una construcción de 1706.
El nevero se caracteriza por la ausencia de pozo y la escasa profundidad que varía entre los 1,50 metros de la zona Sur y los 3,50 dela zona Norte. De 20 metros de diámetro, el depósito no tenía cubierta de obra y se confeccionaba anualmente con ramas, lonas tierras y piedras para proteger la nieve del exterior.
El nevero emplazado estratégicamente pudo tener una relación muy directa con la Cartuja de Portaceli y proporciona hielo a las comarcas cercanas e incluso a la ciudad de València. Sería utilizado, seguramente, hasta principios del s. XIX, cuando fueron exclaustrados los monjes de Portaceli. Está declarado Bien de Relevancia Local.